EDITORIAL:
¡LA VAN A PAGAR!
Imagen original del Juicio de Nuremberg (Final de la II Guerra Mundial) > Vista de la tribuna donde fueron ubicados los jerarcas Nazis acusados de crímenes de guerra, con sus apellidos y respectivas sentencias (nov 1945 - oct 1946).
Imagen original del Juicio de Nuremberg (Final de la II Guerra Mundial) > Vista de la tribuna donde fueron ubicados los jerarcas Nazis acusados de crímenes de guerra, con sus apellidos y respectivas sentencias (nov 1945 - oct 1946).
* * * * *
La voluntad ciudadana marcó el fin de este régimen. Ya
no hay permisos para demoras, ni distracciones. Esta es una sentencia de 9 de
cada 10 venezolanos. El 06/12/2015 el mandato popular lo sentenció y la
Asamblea Nacional está obligada a seguir ese mandato en diciembre de 2016 ¡YA!.
Más pasa el tiempo hay más muertes, más miseria, más dolor,
más diáspora… Maduro y su grupo se desploman sin tener misericordia con el ser
humano que vive en Venezuela. Esto es crimen contra la humanidad en el más grave de sus niveles y ni sus cómplices pueden evitar la cárcel.
¿Darle oxígeno a Maduro? Es un suicidio electoral … o acaso
confesar que se tiene un “enchufe” al que hay que aferrarse para evitar la
cárcel.
¡Así es! Estar con Maduro significa cárcel dentro o fuera de Venezuela.
A pesar de que en algún momento del lejano pasado
hubo una fachada de legitimidad democrática, muchas personas todavía no se ubican en la
realidad (del presente) criminal, ilegal e inconstitucional en la que están
incursas las personas que usufructúan cargos en el Estado Nacional, partiendo
desde Nicolás Maduro Moros y demás adeptos ubicados en Ministerios, Fuerzas
Armadas, Servicios de Seguridad, Tribunal Supremo de Justicia, Tribunales,
Consejo Nacional Electoral, Contraloría General de la República, Fiscalía
General de la Nación, Consejo Moral Republicano, etc.
Muchos venezolanos justificando su desánimo, todavía ven al mundo como en el medioevo cuando
el señor de la tierra era dueño absoluto y tenía todos los derechos, no
importando aquello que dijeran las leyes (si acaso las hay).
El mundo moderno tiene leyes y ningún país está aislado como un feudo. La gente ya sabe que no hay dueños de la vida de nadie y que violar una Constitución, una ley o a los derechos humanos, aún cuando tal violación no represente un castigo inmediato, conlleva a una sentencia de cárcel que hasta puede ser de por vida. Estas palabras pueden ser de alivio pero este no es un mensaje de aliento, sino la descripción absolutamente sólida de la realidad internacional. La globalización de los derechos humanos es una realidad.
El mundo moderno tiene leyes y ningún país está aislado como un feudo. La gente ya sabe que no hay dueños de la vida de nadie y que violar una Constitución, una ley o a los derechos humanos, aún cuando tal violación no represente un castigo inmediato, conlleva a una sentencia de cárcel que hasta puede ser de por vida. Estas palabras pueden ser de alivio pero este no es un mensaje de aliento, sino la descripción absolutamente sólida de la realidad internacional. La globalización de los derechos humanos es una realidad.
Es decir. Quienes dicen “pero siguen mandando y
matando como si nada” mejor reseteen al software que llevan en sus mentes y
actualicen los archivos para que se ubiquen en el plano presente. Cierto que lo hacen, pero para cada vez tener un más alto nivel de oportunidades para estar en la cárcel. Las sentencias de la Corte Penal Internacional de La Haya, son de obligatorio cumplimiento en sus cárceles.
En dos platos: lo que han hecho y están haciendo, Maduro y sus camaradas, representan crímenes que les pueden dar la cárcel hasta
de por vida, sea en Venezuela o en La Haya ¡júrenlo! Solamente a un grupo tan
primitivo se le ocurre creer que pueden burlar al orden internacional como si
la humanidad no tuviera mecanismos legales para proteger su existencia. Este ya
no es el mismo mundo que perduró hasta la mitad del Siglo XX. Desde el juicio a los Nazis en Nuremberg y
la consolidación de los DDHH en la ONU, los crímenes de lesa humanidad son universales y jamás prescriben. Entonces: ¡A
ubicarse!
El asunto tampoco es nada light para quienes son sus espías
dentro del grupo opositor. Los juicios delatarán sus nexos y en el caso de
haber sido quienes hayan favorecido la permanencia de Maduro, podrían ser
culpados de cómplices en tales crímenes.
La situación es peor en la medida que pase el tiempo.
Tanto para Maduro como para el venezolano. Los opositores ya no solo se
enfrentan al castigo electoral que podría representar su negligencia, sino que
la presunta complicidad les amenaza.
La estatización del crimen es un modo de operación que en el chavismo ha alcanzado niveles sin precedentes -al menos- en la región americana. NO solo se trata de haber violado principios democráticos, sino el haber convertido en una maquinaria del mal, al Estado de un país en contra de su población y de la humanidad. Realmente este es el ataque más grande que ha experimentado la democracia y la humanidad en los últimos 70 años, toda vez que se han usado instrumentos democrático-estatales para esconder operaciones criminales.
Esta tragedia venezolana va a dejar severos precedentes en la historia del mundo, tanto por la vil e inhumana saña con que Maduro y sus camaradas han ejercido el poder en contra de la población venezolana, tanto como por sus nexos con organizaciones criminales internacionales, así como por la red de complicidades que operaron en beneficio de este grupo criminal – hasta dentro de los círculos opositores. Internacionalmente, nuevas normas serán establecidas y en las Cortes Internacionales, serán dictadas sentencias que nunca antes se habían tomado en contra de los cómplices que permitieron la comisión de tales crímenes.
Esta tragedia venezolana va a dejar severos precedentes en la historia del mundo, tanto por la vil e inhumana saña con que Maduro y sus camaradas han ejercido el poder en contra de la población venezolana, tanto como por sus nexos con organizaciones criminales internacionales, así como por la red de complicidades que operaron en beneficio de este grupo criminal – hasta dentro de los círculos opositores. Internacionalmente, nuevas normas serán establecidas y en las Cortes Internacionales, serán dictadas sentencias que nunca antes se habían tomado en contra de los cómplices que permitieron la comisión de tales crímenes.
La vida política será otra, después de la caída del
chavismo ¡La van a pagar!