EDITORIAL:
“¿Victoria pírrica?” (23/06/15) /
El término pírrico fue usado
en el pasado reciente por Hugo Chávez, pero no es de su invención (como quizás
lo puedan acusar algunos miembros de la fauna antiinteligente). Significa un
triunfo exiguo por los tan altos costos para el vencedor, hasta el punto de
concluir que hubo dos bandos derrotados,
uno más y otro, menos. Su origen proviene del triunfo altamente costoso de las
tropas de Pirro, rey de Epiro, ante tropas “itálicas”, en el tercer siglo a.C.
Ayer en la mañana el CNE anunció la fecha de las elecciones parlamentarias para
el 6 de diciembre. Obviamente que de mantenerse las presentes condiciones (aún
con todas las trampas por venir) para el régimen se predice una potencial
derrota electoral. Del lado opositor, bien podría significar esa fecha
decembrina una potencial victoria, si es que logra encontrar el tortuoso camino
de victorias sobre las sucias maniobras ventajistas del régimen. La ausencia de
la UE y la OEA oscurecen al proceso – aún cuando a futuro no es descartable un
cambio de tal decisión.
Ahora bien. Ya los altos costos de la presunta
victoria opositora comienzan a aparecer. Leopoldo López se aferró a una huelga
de hambre hasta tanto no se diera esta fecha. En el largo tiempo (casi un mes)
de su ayuno protesta expuso su cuerpo a un muy alto estrés hasta el punto de
hoy estar en peligro su vida y si es que sale vivo, quedará con daños
irreparables en términos vitalmente importantes. Así también quedarán para el
resto de sus vidas, muchos de los líderes de Voluntad Popular y grupos
estudiantiles, quienes con valiosas responsabilidades dentro del futuro de
Venezuela, van a estar expuestos a enfermedades o complicaciones médicas.
¡Honestamente!
Acabar con la salud o la vida de cualquier persona, a más valiosa peor, no
puede ser considerado un triunfo en ningún aspecto. Debe reconocerse que se pudo
conseguir el mismo objetivo con la misma presión internacional que existe hoy
para la liberación de los presos políticos. No es nada favorable el escenario
internacional que sufre el régimen por las acusaciones ya conocidas.
Quien
quiera decir que es un triunfo de la causa de los huelguistas porque solamente
deseaba un fecha a cualquier costo, mejor piense primero en la vida y salud de
los sacrificados como si fueran sus hijos o hermanos, a ver si, en el futuro verán
al mismo triunfo, cuando se compliquen las secuelas en su salud y hasta sufran
el olvido de la gente.
Lo único que se puede celebrar en todo esto es la
suspensión de la destrucción de la salud o vida de buenos seres humanos. ¿Lo
demás? Se lo pueden preguntar a quien tome en cuenta la lógica de los errores
en las lecciones de la historia. Asi como suena Pirro ¿les suena Brito?
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